No reviste ninguna complicación de uso:
1.- Desenroscamos el cuerpo de la estilográfica de la boquilla.
2.- Giramos en sentido antihorario la pieza exterior o fuste, que aloja en su interior un pistón para hacerlo bajar y así expulsar el aire.
3.- Introducimos el convertidor en el hueco de la boquilla efectuado a fin de acoger el cartucho.
4.- Introducimos la estilográfica en un tintero y procedemos a volver a girar el fuste, esta vez en sentido horario, para que el vacío provocado por la falta de aire arrastre la tinta hacia el interior del convertidor.
5.- Ponemos de nuevo el cuerpo en su lugar y limpiamos con un paño suave la boquilla y el plumin
Ahora solo nos queda hacer unos cuantos kilómetros de escritura para volver a cargar nuestra estilográfica de nuevo.