La estilográfica Parker modelo 53 con decoración de swastikas salió al mercado hacia 1905, a raíz de la moda imperante en esos años de incorporar los dibujos de diferentes etnias para la decoración de las plumas.
La swastika, cuyo nombre viene del sánscrito y significa literalmente "forma bendita", y por tanto portadora de buena suerte, es un símbolo solar que figura en la iconografía de numerosos pueblos, entre los que hay que contar indios americanos como los navajos y los apaches, etnias de china y japón, etc., etc., así como en el hinduismo y el budismo, en la mitología celta, y figurando como elemento decorativo incluso en iglesias cristianas, de estilo románico y gótico, que hunden sus raíces en motivos de decoración romana, e incluso el suelo de la sinagoga judía de Engedi, que fue construido durante la ocupación de Judea por Roma, se decoró con un mosaico de esvásticas.
Este símbolo fue usado por el régimen nazi pero con las aspas giradas en sentido contrario, y por ello y pese a ello, Parker toma la decisión de reunir todas las unidades que tenían en existencia y las destruyó, con ceremonia oficial incluida, mezclandolas con el hormigón con que se estaba construyendo en nuevo edificio situado en Arrow Park, Janesville, Wisconsin; por ese "recuerdo nazi" muchos de los poseedores de una pluma con esa decoración se deshicieron de ellas y es practicamente imposible encontrar hoy en día algún ejemplar de esta bella estilográfica.
Tal es así, que solo se conocen tres piezas, lo que hace de la Parker 53 Swastika una de las plumas más raras, buscadas y cotizadas del mundo, cuya valor andará, mínimo, por los 30.000 Euros.
Estaba chapada en oro, con un sistema de carga por cuentagotas.